Revocación de peticiones tras el caso Bouarfa v. Mayorkas: qué significa para las familias y los empresarios

Que su petición aprobada sea devuelta al USCIS porque un funcionario consular sospecha que se trata de un matrimonio, una relación o una oferta de trabajo falsos es traumático y trágico, sobre todo porque muchas de esas remisiones se basan en breves entrevistas y pocas pruebas de que se trate de una farsa. Las consecuencias pueden ser devastadoras. Ahora, el Tribunal Supremo ha eliminado una flecha de la aljaba de los demandantes para impugnar tales acciones. Recientemente dictaminó en el caso Bouarfa v. Mayorkas que los tribunales federales carecen de jurisdicción para conocer de casos de revocación de la aprobación de peticiones de visado de inmigrante. Esto significa que el único recurso lo tienen el USCIS y el Departamento de Estado, no los tribunales.

Para entender las implicaciones de esta decisión, consideremos un ejemplo común:

Un ciudadano estadounidense presenta una petición de inmigrante I-130 para su cónyuge, con el fin de traerlo a Estados Unidos como familiar directo. El USCIS aprueba la petición y el cónyuge acude a una entrevista para el visado de inmigrante en una embajada o consulado de EE.UU. en el extranjero. Sin embargo, durante la entrevista, el funcionario consular sospecha que el matrimonio no es de buena fe y devuelve el caso al USCIS para que lo revise.

USCIS decide no reafirmar la aprobación y, en su lugar, emite una Notificación de Intención de Revocación (NOIR), citando las preocupaciones del funcionario consular sobre un matrimonio simulado. El ciudadano estadounidense responde y aporta pruebas adicionales para demostrar la legitimidad de la relación. Sin embargo, USCIS determina que las pruebas son insuficientes y revoca formalmente la aprobación de la petición.

Frustrado por este resultado, el ciudadano estadounidense intenta impugnar la decisión del USCIS ante un tribunal federal, por considerar que las acciones de la agencia son arbitrarias y no están respaldadas por pruebas. Anteriormente, algunos peticionarios habían llevado con éxito estos casos ante los tribunales. Sin embargo, la sentencia del Tribunal Supremo en el caso Bouarfa v. Mayorkas cierra por completo esta vía, dejando al ciudadano estadounidense sin recursos judiciales para impugnar la revocación de la aprobación.

El resultado tiene consecuencias de gran alcance, entre ellas:

1. Sin supervisión judicial: Los solicitantes ya no pueden recurrir a los tribunales para impugnar la decisión del USCIS de revocar una petición aprobada. Esto les deja a merced de los procesos administrativos, sin controles externos sobre posibles errores o abusos de la agencia. Una posible solución -presentar una nueva petición- significará ir al final de la cola de tramitación.
2. Mayor carga para los peticionarios: Para evitar sospechas y remisiones consulares, cuando se presente inicialmente la petición, debe documentarse lo más sólidamente posible, con pruebas convincentes del parentesco alegado (por ejemplo, cónyuge, familiar) o de las cualificaciones del beneficiario (por ejemplo, educación y experiencia laboral). Más vale prevenir que curar. Si hay una remisión consular después de la entrevista de visado de inmigrante y USCIS emite un NOIR, entonces responder a un NOIR tendrá ahora un peso aún mayor. Los solicitantes deben presentar las pruebas más sólidas posibles en la etapa NOIR, como no habrá una segunda oportunidad para argumentar su caso en la corte. La falta de respuesta a la NOIR también puede acarrear graves consecuencias: la inhabilitación permanente del beneficiario, por ejemplo, por una declaración falsa con arreglo al artículo 212(a)(6)(C)(i).
3. Posibilidad de extralimitación consular: En los casos que implican remisiones consulares, los peticionarios pueden sentirse injustamente penalizados por funcionarios consulares que no comprenden plenamente sus circunstancias. Sin un recurso judicial, abordar estas preocupaciones se convierte en un reto aún mayor.
4. Casos patrocinados por el empleador: Los empleadores que buscan patrocinar a trabajadores extranjeros también pueden enfrentarse a mayores riesgos. Las revocaciones de las aprobaciones de las peticiones I-140 basadas en el empleo también están sujetas a este fallo, lo que significa que las empresas deben estar preparadas para navegar meticulosamente por el proceso de revocación del USCIS.

Dados estos desafíos, es más importante que nunca que los solicitantes consulten con abogados de inmigración experimentados para preparar profesionalmente las peticiones I-130 e I-140; prevenir proactivamente la remisión consular de la revocación de la petición; y cuando sea necesario, preparar una respuesta completa y convincente a un NOIR. Si usted es un ciudadano estadounidense luchando por reunirse con su cónyuge o un empleador navegando por las complejidades de la inmigración de mano de obra, entender y abordar los posibles escollos desde el principio es clave para el éxito.

Si usted o alguien que conoce se enfrenta a una petición de revocación, no dude en ponerse en contacto con nosotros.